martes, 18 de noviembre de 2014

Count down…cuántos días faltan pal'viaje?!

Entonces, cuando ocupen contratar alguna persona especialista en conteos regresivos, me contactan!!! De esto se lleva tratando mi vida, de contar cuántos días faltan para mi próximo viaje; ya sea porque es un país nuevo, un reto nuevo de trabajo, un país conocido que me encanta, un viaje de fin de semana que me espera, ooooooo viajar de vuelta a casa…a Costa Rica, a donde me esperan mis “papinis” felices con comidita deliciosa, tertulias con mis amigas, ahora este “mundillo” de ir a entrenar CrossFit, o simplemente hacer nada.

Este viaje a Buenos Aires me dejó un par de kilitos más, lo normal cada vez que vengo aquí; son los kilos más disfrutados y saboreados, llenos de dulce de leche, de facturas (son la típica repostería que venden en Trigo Miel o en Leandro, o si nos ponemos más finos en Spoon; sólo que unas 20 veces más ricas) y de cenas espectaculares.

Hablemos de eso, dónde cenar en Buenos Aires?...cuál es el procedimiento común cuando quiero salir a cenar en cualquier país en el que me asignen?: 1. Google it, 2. FourSquare, 3. Recomendaciones de locales. Retomemos, al día de hoy, mis sitios favoritos son: 1. Sarkis (la mejor comida Árabe que se imaginen), 2. BASA (mejor salmón de Sur América), 3. Don Julio (mejor provoleta y chorizo que antes haya probado), 4. Miranda (la comida está bien rica, pero mi cosa favorita es que fácilmente es el único sitio donde me puedo tomar un juguito de frutas) y 5. Nicky NY Sushi (un sushi ridículamente rico). Hay demasiados lugares para ir, lista infinita de sitios lindos y ricos, mi recomendación es hacer de google y de foursquare sus mejores amigos no importa dónde estén.


Y ahora que está súper “in” esto de #eatclean, o sea, está muy de moda llevar un estilo de vida saludable; pero cómo hacer con tanta viajadera, sin poder cocinar mejor dicho nunca, sin estar matriculada a un gimnasio o un box fijo?...pues les cuento que sí se puede, pero también les cuento que no lo hago siempre y por qué, porque amo comer, porque me disfruto el probar cosas nuevas, porque salir a cenar significa tertuliar y pasar ratos espectaculares con personas queridas. Ah bueno ya, tampoco es que sufro de sobre peso pues, ni que estoy mal alimentada, ni que solo como comida rápida; es que tengo mis “cheat meal” más de una vez a la semana jajajajaja!!!

Mi cartera normalmente tiene barritas de proteína, de esas que tienen menos de 2 gramos de azúcar y que la primera vez que uno las prueba se quiere desmayar porque pueden llegar a saber a tierra; también ando mi bolsita ziploc con semillas (luego de 3 semanas, la mitad de las semillas quedan regadas fuera de la bolsita); mi maleta ya tiene su espacio reservado para el tarro de proteína, de esa que no tiene ni azúcar, ni lactosa, que mejor dicho uno no entiende cómo funciona para recuperar músculo luego de entrenar y que me quita el espacio de un par de zapatos. Normalmente mi Facebook y el whatsapp dejan comunicarme con personas que me ayuden aprender a entrenar solita en un gimnasio, o bien, he llegado a entrenar CrossFit fuera de Costa Rica permitiéndome hasta hacerme de nuevas amistades….aahhh vieron, de este estilo de vida saludable también conozco, únicamente que ya no sufro de obsesión por tener un six pack (únicamente aún sueno con tener oblicuos jajaja), me lo disfruto y lo combino con unos "pecaditos" que me alegran esta vida loca.

Me dio mucha gracia un día de estos que una persona me dijo: “debe ser muy difícil llevarte a comer porque tu paladar ya es muy amplio y exigente”…jajajaja se imaginan que nooooo!. Es indescriptible lo que este tiempo me ha hecho valorar cada cosa sencilla, cada pequeño momento y cada comidita casera; no niego que a veces me la tiro de “rica y famosa” (#soquenão) porque me encargo de ir al menos a uno de los mejores restaurantes de donde esté, o que voy a bares de otro nivel en cuanto a estructura, música, etc. pero eso no tiene nada que ver con lo que de verdad me llena el espíritu, valoro y me hace feliz…
…La diferencia entre mi vida de fantasía y mi vida real, eso es lo que enfrento tres semanas al mes; viajes, hoteles, fiestas, comidas, per diem, locura, experiencias de vida, soledad, compañía de más, aeropuertos versus amigos de la vida, familia, pagar con mi planilla, dormir sin aire acondicionado, tomar cafecito con pan de la musmanni, no liquidar los taxis, olor a casa, un atuncito con galleta soda, escuchar cantar a mi papá, abrazar a mi mamá y cositas así. Wooowww la verdad es que lo que compone mi vida es demasiado, me siento completa, me siento agradecida, me siento bendecida, me siento ansiosa, me siento feliz, etc.

Gracias por leerme…hoy espero haberles transmitido exceso de emoción porque así me siento, estoy a unas horas de regresar a casa porque, hoy aún con ese 20% más caro que somos a nivel Latinoamericano, le doy gracias a Dios por ser Tica, hablar con la “erre” y poder llamar a Costa Rica casa.


Bexos & abraxos, mucho xoxo que llaman! 

domingo, 9 de noviembre de 2014

Un olor a tabaco y chanel...

Según "wikipedia", Buenos Aires es conocida como Capital Federal por ser sede del gobierno federal y de acuerdo al último censo en el 2010, tiene menos de 3 millones de habitantes pero más de 2.5; cuenta con un perfil urbano marcadamente ecléctico y la apodan "La París de América". También habla de un montón más de #cositas muy interesantes, relacionadas a historia, geografía, etc., pero está más bonito que yo les cuente lo que en menos de 5 visitas he conocido de Buenos Aires.

Luego de aproximadamente 8 horas de viaje desde Costa Rica, aterrizo en Buenos Aires y justo ahí, desde el aeropuerto, percibo un característico olor a tabaco y chanel...comienza la travesía y son 40 minutos más hacia el hotel, sí hotel porque es ahí donde vivo el 90% de mis días, contando millas para alcanzar máximo estatus en cualquiera de las dos cadenas que me suelo hospedar.

Justo aquí me comienza a cautivar con sus calles, avenidas, autopistas; unas rodeadas de hermosos árboles pintados de morado, otras rodeadas de las que denomino "favelas argentinas"; otras de parques enormes con maquinaria para hacer ejercicio en pleno aire libre, llenos de árboles pintados de un verde vibrante y repletos de paseadores de perros....eso!, eso es algo que me atrae de este país, la posibilidad de escoger dónde salir a correr o caminar o llevar a los nenes a jugar o simplemente dónde irte a sentar a hacer tertulia en una tardecita de verano. 


 Buenos Aires está compuesto de escenas que cautivan, tiendas con un estilo "bohemio-chick" del cual no entiendo nada pero me encanta como se ve, de zapaterías con unas plataformas deformes hechas especialmente para poder caminar tanto sin perder altura jajaja! Acepto que la moda no es lo mío, tanto así que prefiero usar poquita tela shortcitos-enaguitas-vestiditos digo, pa’que no haya mucha que criticar cuando me visto jajajaja!.

Aquí no ves montañas, esas que estamos mal acostumbrado en Tiquicia, pero sus edificios tampoco opacan el paisaje sino que lo llenan de curiosidad porque el atardecer se acomoda perfectamente entre ellos y los árboles y las taxis de color amarillo con negro se las ingenian para llenarla de color. Aquí se respira un aire frío, de personas que no creen pertenecer a América Latina y con un servicio al cliente un poco diferente, pero con un no sé qué que llega acaparar.

Y sigue ese olor a tabaco y chanel, un aroma de cigarrillos mezclado con un olor de choripán a la parrilla y un poquito de Chanel No desconocido…me vas a entender!. Caminar y caminar y caminar; caminar por SanTelmo para la fotica obligatoria con Mafalda, aquí eliges esperar 30 minutos para salir en la foto o mejor que ella sea la protagonista (a mí la verdad no me dio la paciencia para salir abrazada con ella en un #selfie). Caminar por Puerto Madero me encanta, de un lado pega el sol vibrante y de otro nos recuperamos con la sombrita; aquí hay dos paradas que para mí son obligatorias, una en Lupita (restaurante con deseo de ser Mexicano) y la otra es en Freddo (mi top list en cuanto a helados, pero si vienes con niños prepárenlos porque no se dura menos de 30 minutos para conseguir tener el placer de saborear el cielo).
 
Mmmmm…por dónde más caminar? Ah sí, por cuanta feria para comprar cachivaches y dulce de leche que te imagines; claramente, por cuanto bar me presenten, esto es interesante aquí porque el tema de los bares es ser exótico en los tragos y misterioso en sus entradas ya que están en el sótano, ocupas claves y hasta escondidos detrás de una refrigeradora. Cuanto parque quieras encuentras, cuanto restaurante se te antoje hay, cuanto trago te merezcas existe, cuanto postre necesites lo pides, cuanto museo quieras ves, cuanto misterio te guste lo vives.
 
Con el reloj de la Plaza San Martín al frente y su reloj que marca pasaditas las 8:00 p.m. dejo de intentar escribir…me voy hacer siesta y arreglar, aahhh porque aquí el tema de las horas funcionan al revés, se almuerza a la hora del café, se cena cuando esperaríamos irnos a dormir y se parrandea casi al amanecer.

 “Life is short, break rules, forgive quickly, kiss slowly, love truly, laugh uncontrollably and never regret anything that made you smile” / “La vida es corta, rompe reglas, perdona rápido, besa despacio, ama de verdad, ríe sin control y nunca te arrepientas de lo que sea que te haya hecho sonreír”


Besos, abrazos, amorSH y muchas cositas ricas!


sábado, 8 de noviembre de 2014

Eso que despierta mis sentidos

Todo inicia un primero de agosto del 2013, mi primer día en una nueva etapa profesional, en una nueva oficina, en un nuevo equipo de trabajo, en una nueva posición; sin saber lo que de verdad me esperaba, sin experiencias similares, sin miedo pero con muchas preguntas, sin angustia pero con mucha ansiedad, sin nada que perder pero con mucho que dejar.

Es a partir de ahí que mi vida se convierte en algo poco convencional, rodeada de nuevas culturas, amanecida en hoteles varios, recibiendo los atardeceres desde un avión, anocheciendo en una calle desconocida…es a partir de ahí, donde una mujer de menos de 3 décadas se lanza a la aventura de lo desconocido, de lo nuevo, de lo incierto, de los retos; es ahí en donde se me olvida lo que “zona de confort” significa.

Mi título y mis profesores me han dicho que sé algo de números, pero la verdad es que yo de lo único que estoy segura es que de letras no sé nada; pero sí se expresarme, sí se comunicar pasión, sí sé que amo hablar, y como no tengo un programa de radio “pa’hablar un ratico tonteras” entonces es que hoy, un año con tres meses y ocho días después, decido iniciarme en este mundo de “bloguera”.

A quien quiera enviarme sus correcciones gramaticales, le voy a estar muy agradecida; sin embargo, mi objetivo es compartirles, contarles, chismearles, expresarles lo que se siente viajar más del 80% del tiempo; conocer tantas personas nuevas pero no saber si las vuelves a ver, tener cicatrices de geografías varias, lo que ya es ya no saber si vas o vienes, comer en los mejores y peores sitios, enfiestarse en no sé dónde, sentir el calor y el frío inesperado…pero sobre todo, cómo un princesa que creía en los cuentos de hadas ha sobrevivido, crecido, agradecido y valorado tanta Bendición junta.

Me encanta esta idea de mi blog, quiero contarles dónde se come rico, dónde la fiesta está increíble, dónde los atardeceres son espectaculares, dónde el viento sopla con olor especial…también dónde amanezco y anochezco, y por qué no dónde el cafecito está buenísimo. Hacerles reír con mis historias en los viajes, presentarles nuevos personajes, expresarles lo que es valorar la familia, los amigos y el país donde nací.
Por hoy solo es la formalización de la introducción, pero les cuento que estoy en Buenos Aires, un país que sabe poner mis sentimientos a flor de piel, que pone a prueba mis debilidades, que me hace subir un par de kilitos, que saca lo bohemio en mí y que pone a trabajar mis fortalezas. Este sitio es hermoso y mañana les cuento a detalle lo que se vive aquí.

Besos, abrazos, cosas buenas, ricas y demás!

“No me importa si hablan bien o mal de mí, lo que me importa es que lo hagan”…hay que darles una ayudadita a esas personas jajaja! J